Víctor Exner vs. Matías Lovera - Foto: Boxeo de Primera --- Mario Margossian

Víctor Exner vs. Matías Lovera - Foto: Boxeo de Primera --- Mario Margossian

Argentina Boxing Promotions desea informar la realidad de lo sucedido en el caso del combate entre Matías Lovera y Víctor Exner, del pasado viernes, 10 de diciembre, en el estadio de la Federación Argentina de Box (FAB), en Buenos Aires. La empresa, liderada por Mario Margossian, envía el presente comunicado con el fin de aclarar lo sucedido y a su vez, desmentir un sinnúmero de falacias que se han dicho y publicado, empezando precisamente por la entidad rectora de nuestra actividad. Es menester remarcar que esta misiva no es contra la FAB, honorable entidad que respetamos y con la que siempre hemos trabajado, sino que nos vemos obligados a hacerlo ante las reiteradas falsedades emitidas por algunos de sus integrantes. La FAB jamás informó que no estaba autorizada la disputa del título argentino supermediano entre el campeón, y el retador, clasificado en el ranking.

No nos es grato tener que entrar en un cruce de declaraciones, especialmente cuando además se trata de personas que conocemos y respetamos desde hace años -décadas en algunos casos-, pero es imperioso dar a conocer la verdad de los hechos. Por tal motivo, en el presente explicaremos paso a paso los sucesos, y responderemos a la publicación realizada por la FAB, que además de ser falaz, es contradictoria en sí misma y no se condice con su propio accionar. Para todos los casos, contamos con las evidencias correspondientes, debidamente documentadas, y que se encuentran a disposición de quien lo requiera.

Hemos instado a la FAB a rectificar sus mentiras, que producen un daño a nuestra compañía, y a sus integrantes en particular, como así también los boxeadores implicados y los fanáticos en general. Les hemos brindado tiempo más que suficiente para hacerlo. Pero ante su negativa, es que debemos salir informar la única verdad de lo sucedido.

JAMÁS SE INFORMÓ LA NEGATIVA SOBRE LA APROBACIÓN DEL TÍTULO

Se cumplieron todos los pasos reglamentarios, exigidos por la FAB. La entidad jamás informó la negativa de ningún combate ni título del evento. Los hechos fueron de la siguiente manera:

– El día 8 de noviembre del corriente, más de un mes previo a la velada, Mario Margossian se presentó ante Luis Zelikowicz, titular del Comité de Boxeo Profesional, y solicitó verbalmente la aprobación de la pelea entre el campeón Lovera y Exner -N° 6 del ranking argentino mediopesado-, por título argentino supermediano. Solicitó la nota oficial.

– El día 14 de noviembre, fue enviada vía correo electrónico la primera nota oficial de nuestra empresa con la programación de los combates, para ser autorizada. Tal como exige la FAB, se envió al Comité de Boxeo Profesional, que incluía la disputa entre Lovera y Exner del campeonato argentino supermediano, como así también la disputa de la corona sudamericana vacante de la división entre Abraham Buonarrigo y Ezequiel Maderna. Sobre la misma, jamás hubo objeción alguna. Ni vía correo electrónico, como tampoco por otros medios, ya sea telefónico, mensajes de WhatsApp, ni mucho menos presencial. A partir de esa fecha, en innumerables ocasiones mantuvimos conversaciones con dirigentes de la FAB, y nadie manifestó objeción, no sólo de este combate sino de ninguno del evento.

– El 29 de noviembre, a las 13:53, se envió otro correo electrónico a las mismas cuentas, con nota oficial con la programación del evento -que incluía los dos mismos combates titulares y un cambio en un combate complementario, no titular-. Fue recibido, y nada fue objetado.

La misma nota fue enviada el 6 diciembre. Jamás se objetó un solo combate ni título.

A su vez, la nota fue presentada en la Dirección de Deportes de la ciudad de Buenos Aires (comisión municipal de boxeo), el 2 de diciembre a las 15:43, tal como lo requiere la misma.

El 6 de diciembre, a las 16:48, volvió a enviarse a través de un correo electrónico la misma nota oficial a la Dirección de Deportes de la ciudad, con la única actualización de la cancelación de un combate complementario (el resto permanecía igual).

EN NINGÚN MOMENTO LA FAB INFORMÓ NINGUNA OBJECIÓN DE NINGUNO DE LOS COMBATES, NO SOLAMENTE LOVERA-EXNER, SINO DE LA TOTALIDAD DEL EVENTO.

El 8 de diciembre, a las 20:03, el fiscal del evento, Dr. Luis Doffi, se comunicó con uno de los integrantes de nuestra empresa, para conocer la sede de la ceremonia de pesaje. Como se trató de un evento desarrollado en jurisdicción de la ciudad de Buenos Aires, la comisión municipal exige que el pesaje se efectúe en sus instalaciones. Se le informó al Dr. Doffi de la misma junto a su horario. Doffi comunicó que no podría apersonarse y que en su lugar enviaría al dirigente Jesuan Letizia. En ningún momento de la comunicación, informó que se objetaba la disputa del título argentino en cuestión.

Incluso, el Dr. Doffi solicitó la programación nuevamente. A las 20:10 se le envió la misma nota oficial vía WhatsApp, con los cinco combates -dos de ellos titulares-. Los mensajes figuran leídos, e incluso tras ello la conversación continuó. Jamás informó modificación alguna.

El 9 de diciembre -día del pesaje-, uno de los integrantes de nuestra empresa se comunicó con el Sr. Roberto Rilo, a las 14:05, por motivos ajenos al evento. En ningún momento se comunicó nada en relación a la disputa del título argentino supermediano.

EL DÍA DEL PESAJE

El 9 de diciembre se desarrolló la ceremonia de pesaje en las instalaciones de la Dirección de Deportes de la ciudad de Buenos Aires, sita en el Polideportivo Colegiales, minutos pasados de las 16. De la misma, además de los boxeadores y el personal de Argentina Boxing Promotions, se presentaron Jesuan Letizia, en representación del Dr. Doffi y la FAB, y la delegación de la comisión municipal, encabezada por Mariano Lafranco.

Al momento del pesaje, Víctor Exner subió a la balanza excedido de peso, por lo que debió trabajar unos minutos para bajar de peso. Tiempo después, regresó a la báscula y tanto Letizia como todas las autoridades oficializaron el peso reglamentario dentro de la categoría, para poder disputar el título.

Al dar el peso Exner, todos los asistentes aplaudimos, mientras se reiteró que la pelea sería por la corona nacional de los 76,203 kg. No solo nadie informó objeción alguna del título, sino que incluso se reconoció con dichos aplausos.

Es más, en caso del combate no haber sido autorizado por título, ¿cuál era la necesidad de obligar a Exner a bajar los gramos de más? Ninguna.

A pedido del Sr. Letizia, una vez culminado el pesaje, Mario Margossian se dirigió a las oficinas de la FAB a entregar toda la documentación del evento, que lógicamente incluía el apartado de los dos títulos en disputa. A las 17:35, los entregó en mano y firmados en Secretaría de la FAB. Justamente allí se encontró con el Sr. Rilo, que le comentó reciente su asunción como titular del Comité de Boxeo Profesional, y con el Sr. Zelikowicz -saliente en dicha posición-, que se lo confirmó. Ni uno ni el otro informaron ninguna objeción de los títulos en disputa el día siguiente.

10 DE DICIEMBRE, EL DÍA DEL EVENTO

El mismo día de la velada, a las 11:39, el Dr. Doffi se comunicó con uno de los integrantes de la compañía, para solicitarle unos detalles de información de uno de los combates complementarios. Se le respondió dicha inquietud. En ningún momento de esa comunicación, desarrollada vía mensajes de WhatsApp, Doffi informó nada acerca de las peleas titulares. De haber tenido la intención, podría haberlo hecho.

A las 17:20 arribó el personal de Argentina Boxing Promotions a la FAB, puesto que la velada televisada por TyC Sports y TyC Sports Play contaba con cinco combates amateurs del ciclo Boxeo de Primera Promocional.

Horas después arribaron las autoridades profesionales, encabezadas por el Dr. Doffi. Nadie comunicó absolutamente ninguna objeción.

El primer combate profesional comenzó pasadas las 20:20, con total normalidad. Cerca de las 20:55, el fiscal le entregó las autoridades de los combates siguientes al anunciador. Minutos después, el Dr. Doffi informa a uno de los colaboradores de la empresa que el combate entre Lovera y Exner no había sido autorizado por título. Jamás se lo informó al titular, Mario Margossian. LLEGÓ LA SORPRESA A MINUTOS DEL COMBATE.

Ante la consulta de Margossian de la repentina decisión, Doffi indicó que Rilo lo había llamado indicando que ahora la pelea no sería titular, y que ante cualquier duda, se comunicara con él. Eso se intentó hacer. Asimismo, Doffi ni siquiera informó a los boxeadores de la repentina decisión.

Mario Margossian llamó telefónicamente al Sr. Rilo, quien no atendió. Fueron ocho llamados consecutivos, mensajes de WhatsApp, etc. Todos llegaron, pero no tuvieron respuesta. Por tal motivo, se llamó al Sr. Jorge Molina. Éste último sí atendió, y manifestó que se comunicaría con Rilo, para conocer lo sucedido, con la intención de encontrar alguna explicación o solución. Minutos después, Margossian volvió a llamar a Molina, y éste le respondió que ya había hablado con Rilo, y que volviera a llamarlo que ahora sí lo atendería. Mientras tanto, el tiempo pasaba. Margossian llamó nuevamente a Rilo, y no respondió. Fueron un sinnúmero de llamados, menajes de WhatsApp, todo… JAMÁS HUBO RESPUESTA. Los llamados, con Molina, y luego intentando comunicarse con Rilo, continuaron incluso hasta después de iniciado el combate Lovera-Exner. Se buscaba una solución, al menos una explicación definitiva.

Jamás nadie de la FAB informó. Nadie se hizo cargo. Ni a los boxeadores se les comunicó.

Como si fuera poco, hubo que tolerar el titular de la empresa, Margossian, como así también sus integrantes, sean tratados de estafadores -entre otros improperios- en televisión nacional.

Hasta los mismos periodistas que durante semanas se jactaban en insistir que Exner no se encontraba a la altura de competir por el título frente al campeón Lovera, luego únicamente tomaron declaración al propio Exner, que frustrado con la situación -cosa que se comprende-, y desconociendo los hechos, manifestó su descontento con acusaciones infundadas, aunque entendibles en el momento en que se encontraba.

Nos preguntamos: con Margossian a menos de cinco metros, ¿tan difícil era solicitarle brindar explicaciones e informar lo sucedido en la misma transmisión? Incluso a la FAB. ¿Por qué denegarle esa posibilidad? No queremos imaginar que existiese deseo de lesionar la imagen de una parte en particular.

Lo cierto es que la FAB JAMÁS INFORMÓ NADA. Un detalle, para algún desentendido: Exner venció ampliamente a Lovera. ¿Habrán imaginado que sería al revés? ¿Habrán creído que no había equivalencias?

RESPUESTA AL COMUNICADO DE LA FAB

En un comunicado publicado el pasado lunes en sus redes sociales, la FAB insiste en las mentiras, y permanentes contradicciones, que se explican a continuación:

EN LOS PUNTOS 1 y 2, se informa que el combate no había sido autorizado por título argentino supermediano, dado que Exner se encontraba ranqueado en la división superior -mediopesado-. Esto se contradice con el propio accionar de la FAB. A saber:

– No hay que retroceder mucho en el tiempo, tan solo una semana. El 3 de diciembre, Gerardo Vergara expuso su título argentino mediano frente a Diego Ramírez, con victoria en fallo unánime. Al momento del combate, Ramírez figuraba N° 2 del ranking argentino superwelter -categoría inferior-. Recién el 7 de diciembre -cuatro días posterior a la pelea-, se dio a conocer el ranking nacional, con Ramírez clasificado en mediano. Pero el combate ya se había desarrollado.

Eso no es todo. Cuando el mismo Gerardo Vergara se presentó como retador al título argentino mediano, en poder de Emiliano Pucheta, se encontraba N° 6 del escalafón nacional superwelter -categoría inferior-. La pelea fue autorizada como titular, y el vencedor fue Vergara, el 27 de agosto.

– El mismo viernes 3 de diciembre, en la misma velada de Vergara-Ramírez, sucedió algo aún más notorio. Juliana Basualdo superó a Vanesa Taborda y conquistó el título argentino supergallo. Basualdo figuraba como N° 1 del ranking argentino gallo -categoría inferior, puesto que el ranking de diciembre fue publicado el 7 de este mes-, y TABORDA NI SIQUIERA APARECÍA EN NINGÚN PUESTO DEL RANKING. Es lógico, llevaba más de dos años sin combatir, y además es mayor a 34 años -tiene 37-, por lo que la FAB entiende que en esos casos se trata de púgiles con licencia cancelada. Así y todo, peleó por el título argentino.

– No es solo ahora. Ejemplos como éstos hay mucho más, tanto actuales como del pasado. Son incontables, y suceden prácticamente todos los meses. Enumerarlos sería interminable. Solo basta con verificar los combates y los rankings de los protagonistas. Lo cierto es que LA FAB APRUEBA COMBATES POR TÍTULO ARGENTINO DE PÚGILES CLASIFICADOS EN DIVISIONES DIFERENTES.

LA MAYOR MENTIRA: EL PUNTO 3

En el punto 3, se sostiene que la “Comisión del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires” informó que no se encontraba en disputa el título argentino. DOBLEMENTE FALSO.

En primer lugar, es falso porque sencillamente no lo informó, como ya fue explicado en el paso a paso de lo ocurrido. Pero más aún porque NO ES POTESTAD DE LA COMISIÓN MUNICIPAL DECIDIR SOBRE LOS TÍTULOS FAB. LA ÚNICA ENTIDAD QUE PUEDE DETERMINAR LOS TÍTULOS FAB ES LA PROPIA FAB.

Parecería incensario explicarlo. La comisión municipal únicamente puede determinar aprobar o no un combate. Pero no tiene potestad sobre los títulos de ninguna entidad. No designa título alguno. Eso es menester de los organismos encargados de hacerlo, ya sea nacional, como en este caso la FAB, o internacionales. Sino, basta con leer los reglamentos.

PUNTOS 4 Y 5: RECONOCER A MEDIAS Y CONFUNDIR

La FAB misma reconoce que existió una “deficiente comunicación” por parte de la misma entidad, “debiendo descartarse de plano mala fe de las partes involucradas”, pero no asume que el error fue de la propia FAB. En otras palabras, admite una deficiencia que niega en los puntos anteriores.

CONCLUSIÓN

Con todo esto, queda evidenciado el accionar de la FAB. JAMÁS SE INFORMÓ QUE NO SE DISPUTABA EL TÍTULO ARGENTINO SUPERMEDIANO. Oportunidades para hacerlo, durante más de un mes, sobraban. Los motivos se desconocen.

¿Habrán imaginado que Exner sería brutalmente castigado por Lovera, como algunos “periodistas” y operadores sostenían? Esperamos que no. Sino, no harían más que evidenciar un desconocimiento por el boxeo.

Contamos con absolutamente todas las pruebas que certifican nuestros dichos. Correos electrónicos, notas oficiales firmadas y entregadas (con copia), y hasta mensajes de WhatsApp. Están disponibles para quien lo requiera.

Si alguien de la FAB, se atreve a contradecir lo que aquí se expone, que presente las evidencias. Que prueben de manera real y fehaciente de qué manera supuestamente avisaron. Adelanto: no lo harán. Tales pruebas no existen.

Esperamos que estos sucesos se hayan realizado por negligencia y no adrede. Duele decirlo, pero la FAB, o al menos algunos de sus integrantes, mienten. Y en su falacia, manchan el nombre de terceros.

POR ELLO, INSTAMOS UNA VEZ MÁS A LA FAB A RECAPACITAR, RECTIFICAR SUS DICHOS, PARA QUE ESTA SITUACIÓN NO PASE A MAYORES, RESPONSABILIZARSE DE SUS ACTOS Y LIMPIAR EL NOMBRE DE PERSONAS AJENAS A SU ACCIONAR.

No alcanza con que off the record, algunos de los dirigentes nos reconozcan que el problema se originó en la FAB, pero que no puedan hacerlo público.

A su vez, agradecemos a los miembros de la prensa sin malas intenciones que sí se pusieron en contacto a lo largo de esta última semana con la empresa para solicitar nuestra explicación de los hechos. A aquellos que sí consultaron las fuentes, y que no se quedaron únicamente con versión, encima alejada de la realidad. A los otros, afortunadamente menores y que muchas veces operan hacia otros intereses, sus conciencias les dirán.

En lo que a nuestra empresa respecta, VÍCTOR EXNER DEBERÍA SER EL CAMPEÓN ARGENTINO SUPERMEDIANO. De todas las partes, se acordó la realización del combate titular. Nadie de la FAB -o ninguna otra persona- jamás informó lo contrario. Exner ganó en buena ley. Y por EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE LA FAB, no es el campeón.